Equipo Editorial de Primera Plana México.
¿Quién es Sofía Castro? Vinculada al PAN desde tiempo atrás. Su ex esposo, José Castañeda Pérez; no es un personaje menor en el blanquiazul yucateco y nacional. Senador de la República, Diputado Federal y presidente estatal de AN.
En una elección tan complicada, como 2006, por el enfrentamiento y polarización provocada por los seguidores de López Obrador, darle seguimiento a la campaña de Sofía Castro Romero, resultaba interesante. Alguien que jamás se había postulado a un puesto de elección; logró ganar el distrito 03 federal con cabecera Mérida con una ventaja cercana a los 40 mil votos frente a su rival Antonio Hadad Manzur de la alianza PRI-PVEM, una de las victorias más holgadas del panismo en ese distrito y quizá de Mérida.
Y a partir de ahí; empezó un desgaste y consecuente debacle del PAN en el distrito en cuestión. Sofía Castro fue hasta el día de hoy coordinadora de la bancada blanquiazul en el Congreso de Yucatán. Llegó ahí por un trabajo político en pro de su partido. De carácter fuerte, pero leal a su partido; fiel a la doctrina panista. Y ahora al renunciar a su partido es quemada en leña verde por la militancia ante una dirigencia que ensoberbecida la menosprecia y tilda de traidora y vendida al sistema; entiéndase PRI. El supuesto pecado: una empresa constructora de su propiedad (que no es nueva, lleva varios años establecida) y que resulta tiene obras con el actual Gobierno del Estado, entre ellas, dicen, el nuevo edificio del Congreso Estatal.
Solamente que esta obra lleva ya varios meses en ejecución. No fue asignada el día de ayer y menos la semana pasada. Y eso lo sabían, y lo saben muy bien en la cúpula panista estatal. Cuestiones de este tipo no se dan de la noche a la mañana.
Pregunta: ¿Quién de quienes la acusa tiene la autoridad moral de hacerlo? ¿Quién tiene de verdad las manos limpias; es una santa paloma?
El que esté libre de pecado, que tire la primera. Así de sencillo.
Mal andan en el PAN si quien disiente es llevado a un santo tribunal donde anticipadamente se sabe el veredicto; cual santa inquisición. Una vez más; fundamentalismo y polarización. Ironías y paradojas de la vida. En 2006, el PAN arropó a la candidata Sofía Castro Romero. Hoy día; la menosprecia, llama traidora y vendida.
Cero y van tres. La elección del domingo en Mérida estará de pronóstico reservado. Con actitudes mezquinas, el PAN construye… el camino hacia su derrota; y la victoria del PRI, con su candidato Nerio Torres Arcila. La cita, es el 7 de junio.
Ya lo veremos.
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