A Ocho Columnas: Más vivienda, para más yucatecos.

Cuando algo se hace de manera radicalmente diferente, nueva y original a como se hace rutinariamente hablamos de romper paradigmas. No se puede seguir haciendo lo mismo y esperar resultados diferentes. Se requiere un cambio; una innovación.

Tener vivienda propia es uno de los anhelos más grandes del ser humano. Contar con techo, la seguridad que este provee y la tranquilidad de ser propietario del mismo. Pero muchos mexicanos, y yucatecos no podían hasta el día de hoy, acceder a siquiera la posibilidad de tener una casa propia. Y esto por las políticas de vivienda vigentes entonces que por “default” eliminaban a cualquier trabajador que ganara menos de dos salarios mínimos.

Y digo vigentes, porque las cosas han cambiado. La SEDATU (Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano); creada por el presidente Peña Nieto al arranque de esta administración y al frente de un yucateco; Jorge Carlos Ramírez Marín se dieron la tarea de impulsar los cambios necesarios para acercar una vivienda digna, de calidad, ecológica y accesible para un segmento, enorme de mexicanos discriminados por el monto de su ingreso.

Y de ahí la idea de hacer algo radicalmente diferente. De la mano de la ONU, expertos nacionales e internacionales en vivienda sustentable nacen los Desarrollos Certificados. Comunidades donde los ciudadanos tienen lo que necesitan para vivir al alcance de su mano: servicios, comercios, escuelas, transporte, etcétera en condiciones que antes hubieran sido imposibles; además siguiendo nuevas políticas de vivienda vertical que llevan el uso de espacios públicos a otro nivel. Áreas públicas comunes donde se puede interactuar con los vecinos y disfrutar el entorno. Hacer comunidad.

Hoy, 20 de febrero de 2015; con la presencia de las más altas autoridades de vivienda a nivel nacional, inició la entrega de las primeras 700 viviendas del Desarrollo Certificado “San Marcos”, en la ciudad de Mérida. Un concepto radicalmente diferente que lleva desarrollo y progreso al sur de la ciudad. Proyecto que en los próximos años comprenderá una auténtica “mini ciudad” dentro de nuestra urbe con todos los servicios; de calidad y cercanos a quienes la habiten. Una forma de evitar la desintegración social es conocer y convivir con los vecinos. Retomar la bonita costumbre yucateca de tomar fresco por las tardes y noches en amena tertulia con nuestros vecinos.

Calles peatonales, ciclo vías, parques lineales, zonas verdes, en armonía. Y la gran innovación: edificios de 5 plantas, con elevadores y celdas solares que proveerán hasta un 80% de las necesidades de energía de los mismos y con un fideicomiso que garantiza el costo de mantenimiento. Algo único, que por primera ocasión se hace en México. Bien por el trabajo del Gobierno Federal, el Gobierno del Estado y el Gobernador Rolando Zapata Bello, haciendo lo propio para dar mas techos y tranquilidad a los yucatecos. Subsidios por parte de la SEDATU y CONAVI de hasta 89 mil pesos en casas cuyo monto máximo este 212 mil pesos. Una auténtica revolución.

Cuando hay voluntad de parte de la autoridad, iniciativa privada y la población; se puede llegar alto y lejos. A promotores de vivienda de vanguardia; como ConstruCasa y Vivo que de la mano con la autoridad hacen realidad las nuevas políticas. La alineación de las políticas de vivienda a nivel nacional empieza a rendir frutos en nuestro estado. Es solo el comienzo. Y vamos por más.

Que tenga un magnifico día.

Comentarios a: emollerb@live.com
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Facebook: Emilio E. Moller

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